En una conferencia de prensa la oenegé Fundación del Río, ilegalizada por la dictadura Ortega-Murillo, presentó los resultados de su Monitoreo de Incendios Forestales en Nicaragua entre los que se muestra que existe un aumento de la incidencia de los puntos de calor a nivel nacional de un 25% comparado con el año 2022, consideran preocupante el ascenso de incendios en áreas protegidas y territorios indígenas y afrodescendientes.

Amaru Ruiz, presidente de la organización ambiental dijo que “este año también ha aumentado el rango de temporalidad en la incidencia de estos puntos de calor, por ejemplo, estamos reportando puntos de calor en el mes de junio, esto se debe a disminución de la pluviosidad y la incidencia del fenómeno del niño en el país”.

Según el monitoreo, entre los meses de enero a mayo de 2023 los sistemas de satélites detectaron 45,427 puntos de calor; en los meses de abril y mayo se observa mayor incidencia con un 47% y 39%, respectivamente.

Además, les inquieta que hay un aumento de incidencia de puntos de calor de un 84% en áreas protegidas y territorios indígenas y afrodescendientes. En territorios indígenas y afrodescendientes se reportan el 69% de incidencias, mientras que en áreas protegidas el 15% de incidencias.

Fundación del Río detectó 1,936 incendios forestales en el país, lo que representa un 87% más de los registros ofrecidos por las instituciones gubernamentales. Para la organización esta disparidad en las cifras implica que hay una falta de capacidad de atención del sistema de prevención y atención de incendios de las instituciones gubernamentales. 

“Las instituciones únicamente están cubriendo áreas de fácil acceso o áreas urbanas; por ejemplo, en el caso de la Reserva de BOSAWAS o de la Reserva Biológica Indio Maíz, las instituciones no reportan incidencias de incendios forestales a pesar de que es donde se concentró el 38% de los puntos de calor de todas las áreas protegidas del país”, destaca el monitoreo de la organización ambientalista.