Tres personas muertas – las de los bomberos Yoandra Suárez López y Luis Alejandro Llerena Martínez y la del anciano Ramón Páez Frómeta -, es el resultado de un derrumbe sucedido en el centro de La Habana vieja, en Cuba. El edificio donde habitaban cientos de familias e integrantes del equipo de Rescate y Salvamento del Cuerpo de Bomberos de ese país, se desplomó en horas de la madrugada del pasado miércoles 4 de octubre.
En la zona ha sido cerrado el paso por las autoridades en unos doscientos metros a la redonda, destacándose la presencia de la policía cubana y de oficiales de la seguridad del estado. Camiones para recoger escombros se han ubicado en los alrededores del lugar. La policía pide el carné de identidad a las personas que habitaban el edificio.
Las personas fallecidas responden a los nombres de Yolanda Suárez López, rescatista, de 40 años, Luis Alejandro Llerena Martínez de 23 años y un desconocido encontrado bajo los escombros, quien se presume sea Ramón Páez de 79 años, según fuentes oficiales.
Otras dos personas lesionadas leves fueron llevadas al hospital local Calixto
El derrumbe se produjo en dos momentos. Un primer desplome parcial ocurrió a eso de la medianoche del martes, habiendo llegado los bomberos, luego gran parte del edificio se desplomó.
La labor de rescate se ha complicado porque el edifico está totalmente colapsado, ha dicho el jefe del Cuerpo de Bomberos de Cuba a medios oficiales.
Gran parte de las infraestructuras necesitan rehabilitación, muchas se encuentran en muy mal estado. “Los edificios no reciben mantenimiento desde los años 60”, manifestaron algunas personas usuarias en las redes sociales.
Apenas un día después de que en la calle Lamparilla se derrumbara un edificio, en lugar de guardar un día de luto en Cuba, una conga tarareaba a unas cuadras de la tragedia. acontecimiento. El medio digital cubano 14 y medio informó que «la comparsa que este jueves subía y bajaba por la calle Obispo, en La Habana Vieja, era la misma que todos los días, acompañada de zanqueros, tocando cajones y cantando, animan a los turistas, siempre abundantes en el centro histórico de la capital».
Fuente: 14ymedio
Foto: almomento.net