Redacción AP

El Servicio Holandés de Cooperación al Desarrollo (SND) anunció este martes el cierre de sus operaciones en Nicaragua a partir del primero de enero del 2022, tras haber impulsado un sinnúmero de proyectos en el país desde mediados de 1980.

En un comunicado, el organismo internacional explicó que trasladará sus operaciones a países con acceso limitado a los servicios básicos y donde la organización pueda tener un mayor impacto.

“La decisión de cesar las actividades en Nicaragua tiene en cuenta que las capacidades locales ya se han creado y que el impacto es menor en comparación con otras geografías”, señaló la oenegé internacional.

El SNV manifestó que en Nicaragua ha generado impactos “positivos a miles de familias nicaragüenses” por medio de una serie de proyectos en áreas como la agricultura, energía renovable, agua y el saneamiento.

“En los últimos años, el Programa Nacional de Biogás, liderado por SNV, estableció 1.500 sistemas de biodigestión que han contribuido a mejorar la vida de 8.000 productores en zonas rurales y a reducir más de 378.000 toneladas de emisiones de CO2”, comparte el organismo como parte de sus logros en Nicaragua.

Además, en temas agropecuarios ha colaborado con cooperativas de café, lácteos, y cacao para “fortalecer su capacidad técnica, mejorando su acceso a mercados estables en el proceso”, precisó.

El SNV se une así a varias organizaciones que han decidido dejar de operar en el país por la crisis socio política y la persecución del régimen OrteguaMurillo. “Nicaragua vive un ambiente hostil para la cooperación internacional y para las mismas organizaciones de sociedad civil, no estamos haciendo nuestro trabajo porque somos hostigados, desprestigiados y muchas veces amenazan a nuestro personal que hace el trabajo en las comunidades rurales del país” expresó una directora de una organización no gubernamental que por temor pidió hablar en anonimato.