Guatemala vivió horas intensas previo a la juramentación del presidente electo, Bernardo Arévalo de León, quien en la media noche de este catorce de enero juró promesa de ley junto a su vicepresidenta Karim Herrera, frente a un Congreso Nacional fragmentado que no logra conformar su Junta Directiva.
Previo a la juramentación una alianza con los bloques de Cabal, Vos, Bien, Viva, Victoria, Winaq-URNG y disidentes de la UNE llevaron a Samuel Pérez del Movimiento Semilla a presidir la Junta Directiva para el próximo período legislativo.
La nómina consiguió 92 votos, mientras que la abanderada por Sandra Jovel, excanciller y aliada de Zury Ríos, solo obtuvo el apoyo de 75 congresistas, provenientes del partido Vamos, Todos, Unionista, Valor, Comunidad Elefante, entre otros.
La elección de la nueva Junta Directiva tomó una jornada de más de 12 horas después de que diputados de la antigua legislatura trataran de impedir que el Movimiento Semilla y sus aliados controlarán el Congreso.
Una de las primeras estrategias para obstaculizar la toma de posesión de sus cargos como bloque Semilla fue crear una Comisión de Verificación, sin que se indicara la forma en la que se eligieron a sus integrantes. Fue dirigida por Javier Hernández, diputado electo por el desaparecido FCN-Nación quien este 14 de enero finalizó su período legislativo.
Esa instancia, con el visto bueno del pleno de la IX Legislatura, decidió declarar independientes a los 23 congresistas del Movimiento Semilla, argumentando que el partido político había sido suspendido por orden del juez Fredy Orellana.
En los últimos minutos el cuestionado presidente de la Organización de Estados Americanos, OEA, Luis Almagro, hacía un llamado a las distintas fuerzas políticas en Guatemala, a las delegaciones internacionales, a los mandatarios y toda la comunidad internacional que lleguen hasta el teatro para juramentar al presidente Arévalo.
Mientras estas declaraciones se daban manifestantes llegaron hasta las afueras del Congreso Nacional exigiendo que se pongan de acuerdo y logren juramentar este día al nuevo mandatario.
El conflicto en el Congreso se presenta luego que la Corte de Constitucionalidad negó el amparo presentado por el Movimiento Semilla, partido político que llevó a Arévalo al poder, lo que hace que esta bancada no entre dentro de ninguna fuerza política imposibilitando que pueda integrar la junta del legislativo.
Guatemala vive una crisis profunda en materia de institucionalidad y Estado de derecho. El denominado pacto de corruptos, una élite política y empresarial han manipulado al Congreso y la Corte de Constitucional para colocar obstáculos en este camino donde Arévalo finalmente tomó las riendas del país.
Luego de subsanados los conflictos en el Congreso, Arévalo y Herrera fueron juramentados, el presidente electo dijo que su «gobierno está firmemente comprometido con la lucha por la preservación y la expansión de los principios de libertad y democracia en Guatemala y Centroamérica y estará presente donde sea necesario apoyar estos esfuerzos. El futuro de Guatemala es inseparable al futuro de Centroamérica que influye en el curso del continente».
«Me dirijo a todos, a los cuatro pueblos, a este pueblo maravilloso de Guatemala, hoy los diversos pueblos que componen la nación avanzan llevando consigo la antorcha de dignidad y libertad. Esta generación de guatemaltecos se ha erigido como un ejemplo de dignidad y determinación para las generaciones que nos seguirán», expresó.
Hasta el cierre de esta nota informativa la incertidumbre ronda el país centroamericano que marca un inicio y un fin en la lucha por recuperar la democracia y el respeto a los derechos humanos.