Salomón Manzanares Calero
La población leonesa reunida en distintos puntos de la ciudad de León, conmemoró un aniversario más de la muerte del Príncipe de las Letras Castellanas, Rubén Darío, quien falleciera en León de Nicaragua el 6 de febrero de 1916.
La actividades darianas que iniciaron el 18 de enero – fecha de su nacimiento – culminaron este pasado 6 de febrero, con la efeméride de su muerte, se ajustará a la celebración el 15 de junio por de los 500 años de la fundación de la ciudad en el occidente de Nicaragua.
En la Plaza Central un grupo de niños y niñas entonaron cantos y recitaron poesía alusivas a Rubén Darío. Según un docente vinculado a la actividad, el homenaje “fue protagonizado por niños y niñas del Coro Rubén Darío del MINED. Todos estos niños han aprendido a cantar y declamar poemas de nuestro gran poeta universal. Por eso nos reunimos aquí entre el colegio La Asunción, oa Real Basílica Catedral, el Palacio de Comunicaciones y el Sesteo y la alcaldía para hacer sonar esos versos que dieron honor y gloria a nuestro país”.
Los escolares vestidos de azul y blanco, algunos personificando al gran poeta, formados frente al público asistente provienen de los municipios de León, Telica y Nagarote.
El 6 de febrero en el Museo y Archivo Rubén Darío y en el parque Rubén Darío o conocido como parque de los poetas, a diferencia de otros años, en la cual hacían presencia intelectuales y estudiosos de la obra literaria de Rubén Darío, en esta ocasión asistieron solamente autoridades políticas y representantes de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua UNAN-León, sin dejar de politizar el evento de carácter internacional.
Entre el programa de actividades se declamaron poemas del escritor universal, se colocaron ofrendas florales, y estudiantes de secundaria con antorcha en manos, recorrieron algunas calles de la ciudad, mismas que en su momento Darío recorrió siendo niño y adolescente, compartiendo sus versos y prosas.
Recuerdan obra Dariana en el exterior
En el Parque Nicaragua en San José, Costa Rica el economista Enrique Sáenz frente al busto de Darío recalcó, “aquí estoy rindiendo homenaje a la memoria de nuestro migrante glorioso, de nuestro entrañable nicaragüense, de nuestro Rubén Darío…y evoco aquellos versos, ‘y la carne que tienta con su frescos racimos y la tumba que guardo con sus fúnebres ramos. Y no saber a dónde vamos, ni de dónde venimos’, mi humilde homenaje”.
Aurelio Reyes, mexicano radicado en Los Ángeles, California, Estados Unidos, es un cantante de mariachi quien compuso Canto a Rubén Darío. En conversación con Agenda Propia Nicaragua dice que nunca a estado en el país, pero hace un homenaje al poeta con su música. «Conocí de Darío cuando estudiaba la secundaria en México, me gustó mucho su poesía. Después me adentré más cuando conocí una organización de ayuda a nicaragüenses en 1998 y compuse está canción, es parte del homenaje al recuerdo de Darío”.
También en California, conversamos con Germán Peña presidente de Nicaraguan American Opportunity Foundation, quien rinde tributo al legado de Darío, aunque por la situación de emergencia ocasionada por las intensas lluvias hubo limitaciones para asistir físicamente a realizar algún homenaje. Sin embargo, el 17 de enero varios nicaragüense se juntaron para celebrar el nacimiento del gran poeta.
Peña manifiesta que “por los años, por los siglos, siempre será Rubén Darío. También será Nicaragua. Un hombre que abrió las puertas al mundo. Es un personaje que nos dio a conocer a los nicaragüenses en el universo. El gran nicaragüense que con sus poemas y otros escritos representa un sinfín. Por ello, recalco en mi libro ‘Rubén Darío The Prince‘, aspectos que todo nicaragüense y ciudadano del mundo amante de la literatura debe conocer del Príncipe de las Letras Castellanas”.
En Bogotá, Colombia también se ha rendido tributo al poeta. El Semanario Voz, publicó “acusado de afrancesado por sus protagonistas, satirizado por sus pares como José Asunción Silva, alabado por prohombres como José Martí y por iconoclastas como Vargas Vila. Negado como poeta americano por pensadores como Rodó y acusado de galicismo mental por hispanistas como Juan Valera, el indio nicaragüense logró, sin embargo, ser el poeta más fiel a su entorno y a su tiempo, especialmente en su libro inicial Azul, por cuanto anunció allí toda la carga expresiva que vendría en el siglo XX, con una expresión verbal riquísima, habiéndola despojado de la mordaza de la monotonía, y a la vez otorgado un gran aliento épico, arterial y epicúreo, que devolvió a España y a América en su verbo castellano, remozado, todo el esplendor que se hallaba hibernando desde el Siglo de Oro”.
Félix Rubén García Sarmiento conocido en el mundo literario como Rubén Darío nació el 18 de enero de 1867. En León de Nicaragua desarrolló sus primeros conocimientos literarios, los cuales fue capaz de llevarlos a nivel internacional. Sus obras principales fueron Azul y Prosas Profanas.