Salomón Manzanarez

Temor, miedo, inseguridad e incertidumbre muestran más de medio millón de venezolanos y venezolanas que bajo algún estatus legal o no viven en los Estados Unidos.

La mañana de este 29 de enero se hizo realidad la suspensión del Estatus de Protección Temporal o TPS por sus siglas en inglés, una noticia que muchos temían donde el presidente estadounidense Donald Trump avaló su revocación del TPS que Joe Biden había aprobado el 10 de enero, apenas 10 días antes que asumiera la nueva presidencia.

“Hoy, (29 de enero) retiramos la orden de la Administración Biden que permitía a inmigrantes ilegales no investigados de Venezuela, incluidos miembros de la pandilla Tren De Aragua, permanecer en nuestro país y violar nuestras leyes”, escribió el Departamento de Seguridad de EEUU en su cuenta de X, luego de que trascendiera la información de que la titular de esa cartera, Kristi Noem, ,confirmara la orden ejecutiva que deja sin efecto la extensión del TPS, informó el Diario Las Américas.

Conocida la noticia, en los Estados Unidos hay mucha incertidumbre entre la comunidad venezolana. “Estoy muerta. Me muero de nervios. No sé que va a pasar con nosotros. Tenía la esperanza que este presidente no rechazara la medida del presidente anterior. Yo me vine y me acogí al TPS porque es una oportunidad para muchos venezolanos que por razones obvias hemos salido de nuestro país”, así se expresa Emilda de52 años, una profesora de primaria que por más de 30 años ejerció la docencia en Venezuela y hace dos años salió para Estados Unidos en busca de mejores alternativas mejores para su familia.

Fidencio, también migrante venezolano expresa, “ya valimos. Estamos en suspenso. Igual que muchos venezolanos, teníamos la esperanza de que nos quedáramos con el TPS, pero no fue así”, dijo.

Una alternativa que tienen muchos venezolanos es regresar a Colombia, donde antes habían encontrado trabajo y refugio. “Ni modo, me regreso a Colombia. Al menos ahí tengo trabajo como antes, expresó.

Por su parte, Luis Leal señala que «trabajaría en construcción o en restaurantes, porque aquí perdimos las esperanzas», dice. Leal labora con permiso de trabajo en una fábrica de alimentos.

En este contexto, el presidente Trump firmó esta tarde la Ley Laken Riley, la cual faculta el arresto y deportación de una persona acusada de cometer un crimen, incluso sin que haya sido encontrado culpable.

Riley era una estudiante de enfermería de 22 años que fue asesinada en Georgia, en febrero de 2024 por un migrante venezolano irregular, José Antonio Ibarra.

La congresista republicana, María Elvira Salazar, en respuesta a la medida de Trump dijo que “el Estatus de Protección Temporal existe para proteger a las personas de un peligro inmediato en su país de origen. El dictador de Venezuela, Nicolás Maduro, encarcela, golpea, viola y asesina a cualquiera que hable en su contra. Es por eso que he apoyado el TPS para los venezolanos que huyen de la persecución política”. Salazar también ha estado abogando para que se otorgue TPS para nicaragüenses que buscan seguridad en USA. Según el Pew Research Center, Florida tiene la mayor concentración de nicaragüenses en todo el país, con un estimado del 37% de la población nica en Estados Unidos. La redesignación brindaría seguridad a millones de nacionales de Nicaragua que viven en EEUU, pero esta depende de la administración de Donald Trump.

Foto portada: La Voz de América