Por S. Manzanares
El Premio Nobel de la Paz argentino Adolfo Pérez Esquivel (94) ha encendido una tensa polémica al dirigir una carta crítica a la opositora venezolana María Corina Machado, también galardonada con el Nobel por el Comité Noruego. En su misiva, Pérez Esquivel, superviviente de la dictadura argentina conocida como el «Proceso de Reorganización Nacional» (1976-1983) , manifestó un tajante respaldo al gobierno de Nicolás Maduro.
Pérez Esquivel relató cómo las luchas contra las dictaduras en su continente y país le trajeron a la memoria los años de las fuerzas armadas argentinas, donde resistió «cárceles, torturas y el exilio con miles de desaparecidos». Sin embargo, a pesar de esta experiencia, calificó al gobierno venezolano como una «democracia con sus luces y sombras».
El argentino defendió que Hugo Chávez «marcó el camino de libertad y soberanía del pueblo y luchó por la unidad continental». Además, arremetió contra Estados Unidos, al que acusó de atacar permanentemente a Venezuela para evitar que salga de su «órbita y la dependencia colonial» , al seguir considerando a América Latina como su «patio trasero». En un punto que subraya su postura, Pérez Esquivel defendió la resistencia del pueblo cubano como un «ejemplo de dignidad y fortaleza» ante el bloqueo estadounidense, dejando clara su «apoyo a la dictadura cubana».
Cuestionamientos directos a Machado y silencios estratégicos
El Nobel también lanzó preguntas directas a María Corina Machado: «¿Por qué llamaste a los Estados Unidos para que invada Venezuela?». Le reprochó haber dedicado el anuncio de su galardón a Donald Trump, a quien describió como el «agresor a tu país que miente y acusa a Venezuela de ser narcotraficante». Pérez Esquivel insistió en que el gobierno de Maduro «vive bajo amenaza de los Estados Unidos y del bloqueo,» señalando la presencia de «fuerzas navales en el Caribe y el peligro de invasión a tu país».
En su afán por apoyar a Maduro, Pérez Esquivel llegó a negar el vínculo del gobierno con el Cartel de los Soles, un grupo de militares y funcionarios venezolanos acusados por Estados Unidos de comercializar drogas. Curiosamente, en su carta, omitió mencionar las relaciones diplomáticas y el apoyo logístico militar de Cuba y Rusia hacia el régimen venezolano.

La réplica del exilio: El dolor antes que la ideología
La crítica del Nobel no quedó sin respuesta. Luis Manuel del Valle Marcano Salazar, exmagistrado electoral y Doctor en Derecho, refutó la postura de Pérez Esquivel en nombre de la comunidad venezolana en el exilio. Marcano, quien fue nombrado Magistrado del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela en 2017 y tuvo que asilarse en la embajada de Chile en Caracas tras ser amenazado por el régimen de Maduro, le dirigió una emocional misiva.
«No escribo desde la ira, ni desde la soberbia, sino desde un dolor que se me hace antiguo, desde esa herida que los venezolanos llevamos abierta,» afirmó Marcano. Le recordó a Pérez Esquivel que, como sobreviviente de una dictadura, «Usted sabe lo que significa el miedo, la persecución, la cárcel injusta». Por ello, le dolió que «desde su merecida autoridad moral, repita el discurso de quienes son verdugos».
Marcano Salazar fue tajante: «No hay comparación posible entre la resistencia democrática venezolana y las aventuras militares que usted teme». El exmagistrado desmintió la intención de una invasión extranjera, aclarando que lo que desean es «libertad, elecciones limpias, justicia, dignidad».
El corazón de su réplica se centró en la violencia y la crisis humanitaria vivida en las protestas de 2014, 2017 y 2019. Exigió al Nobel que piense en:
- Los «arrastrados por las FAES».
- Los que «nunca regresaron de El Helicoide».
- Los «violados con objetos metálicos por negarse a gritar ¡Chávez vive!».
- Los «abuelos que mueren sin medicinas».
- Los «niños que cruzan el Darién buscando un pedazo de pan».
Marcano concluyó con un cuestionamiento directo a la justificación del régimen: «¿Acaso pedir eso es colonialismo? ¿Acaso clamar por auxilio cuando el propio Estado se convierte en verdugo es traición?». La confrontación entre los dos Premios Nobel de la Paz ha evidenciado la profunda división sobre la realidad venezolana, enfrentando la ideología con el crudo testimonio de los derechos humanos
Foto de portada: tomada de AFP