La dictadura Ortega-Murillo continua la persecución hacia la iglesia católica en Nicaragua. Esta vez, mientras el Obispo de Jinotega Carlos Henríquez Herrera se encuentra en la asamblea del Consejo Episcopal Latinoamericano -CELAM- en San Salvador, en su diócesis el régimen por medio de Migración y Extranjería detuvo a Fray Damián Muratori, de origen italiano.

Una fuente eclesial relató a Agenda Propia que oficiales de migración llegaron “el domingo en la noche a notificarle personalmente que debía presentarse en Managua el lunes a las 10 am” la fuente agregó que el religioso de 78 años de edad entró a las oficinas de Migración y Extranjería a las “9:45 am a migración, junto a su chofer y otro laico, de los tres no hay noticias desde ayer” denunció.

Fray Damián llegó a Nicaragua el 14 de marzo de 1976 y estuvo como misionero en el municipio de Matiguás. Desde entonces, ha destacado en múltiples obras sociales, además de ser vice postulador de la causa de canonización de fray Odorico D’ Andrea, a quien los católicos llaman “el santito de San Rafael”.

Según varias personas de San Rafael del Norte la represalia se da luego de que el religioso dijera en su homilía del domingo doce de febrero, que había que unirse en oración “por todos los nicaragüenses en todo el mundo, por los sacerdotes y también ciudadanos que han salido de Nicaragua forzadamente, y oremos también por Monseñor Álvarez que está en la cárcel, 26 años de cárcel, para que él sea valiente y nos enseñe a ser realmente nicaragüenses leales, coherentes y orgullosos de ser nicaragüenses”.

Además, consideró el encarcelamiento de Álvarez, sentenciado a 26 años y 4 meses de prisión, como “un hecho histórico” y apuntó que el obispo “estaba en la lista de los que tenían que ir a Estados Unidos. ¿Se fue monseñor Álvarez? ¿Por qué no se fue? ¡Porque no quiso!… Al final, 220 personas agarraron el avión y uno no lo agarra. ¿Tenía razón Monseñor Álvarez?… Se quedó y para mí, es un verdadero hombre con pantalón… Me echan preso, échenme preso…”.

Junto a Fray Damián se encuentran desaparecidos los señores de iniciales FLRA y FZO, quienes eran colaboradores cercanos en el Santuario Tepeyac del cual es el rector.

Este trece de febrero, religiosos de la Orden de Frailes Menores -OFM- se presentaron a eso de las ocho de la noche a las oficinas centrales de Migración y Extranjería, “lograron entrar al portón y les dijeron que el padre había cometido un delito de meterse en política y que tenían que retirarse del lugar, esa fue la última información que supimos” manifestó a Agenda Propia una fuente de la Orden Franciscana Seglar de Managua.

Fray Damián tenía residencia permanente en Nicaragua, pero debía renovarla anualmente. Sin embargo, en mayo de 2021, la Dirección General de Migración y Extranjería le canceló la residencia y el religioso debe estar renovando su estadía en el país cada tres meses.