Radio Progreso
En el negocio del narcotráfico nada ocurre por casualidad. Todo está conectado. Quien controla los territorios es dueño de la tierra y controla también el narcotráfico, dijo a Radio Progreso, Óscar Estrada, periodista e investigador.
Estrada, es escritor del libro “Tierra de Narcos”, texto donde detalla cómo los grupos de narcotraficantes en colusión con las élites económicas y políticas han logrado el control del país. Y cómo tienen tentáculos en prácticamente todos los sectores.
La extradición de JOH
En el caso de la solicitud de extradición y captura del ex gobernante Juan Orlando Hernández, Estrada opina que se comprueba todo lo que el movimiento social y popular ha venido denunciando desde hace décadas; el país ha estado secuestrado por la mafia en alianza a nivel de crimen organizado y la clase política.
Una alianza que no es nueva, que tiene por lo menos 50 años de estarse consolidando y de la cual también Estados Unidos y sus decisiones han sido responsables de llegar a la situación que hoy enfrenta el país y la región.
“Nos han hecho creer que el problema ha sido Juan Orlando Hernández y un pequeño grupo de nacionalistas, cuando realmente el problema es mucho más complejo que eso. Es una clase política y económica que tiene estructuras como la banca y que están coludidas con mafias y capitales oscuros”, dice.
Estrada señala que, más que la extradición y participación de Juan Orlando Hernández tenemos que entender el contexto en el que llegamos hasta aquí.
JOH es una cadena que tiene que comenzar a desenredarse poco a poco, porque él llega a raíz de un vacío luego del golpe de Estado de 2009, en el cual se posicionan ciertas fuerzas que venían presionando desde gobiernos anteriores.
Y se posicionan para ganar el control político sobre el Estado. Es decir, nos debemos cuestionar sobre a quiénes estaban respondiendo todas las decisiones que se han tomado en los últimos 12 o 20 años.
“Yo recuerdo por ejemplo que en la época de ex presidente Maduro ya se hablaba de vínculos de los partidos políticos con el narcotráfico, y esta conexión de las mafias colombianas en territorios de Honduras como el Bajo Aguan, Olancho, La Mosquitia y el occidente”, señala.
El negocio del narcotráfico es tan poderoso que sus tentáculos están hasta en los sectores menos esperados. Desde la política, empresariado, hasta el sector religioso se ha visto infiltrados por este cáncer.
Sin embargo, el narcotráfico no se puede ver únicamente desde una sola arista. Para analizar su impacto es necesario entender que también responde a una lógica de clase y de poder.
“Hay una razón económica. Los grupos que normalmente gobiernan y toman decisiones lo hacen desde una lógica capitalista voraz, extractivista, donde acumular el capital es mucho más importante que el respeto a los recursos naturales y a los pueblos. Esto nos debe hacer entender que muchas de las acciones que se toman, -hablemos de decisiones alrededor de las mineras, hidroeléctricas-, del mismo modelo neoliberal; están tomadas en función de responder a los intereses de estos grupos, cuyo interés único es la acumulación de dinero”, opina el escritor Oscar Estrada.
Para que un país se desarrolle económicamente, requiere la generación de capital, esos que las élites acumulan para generar el desarrollo dentro de un modelo.
En el proceso de generación de capital, por ejemplo, en Europa fue a través de las colonias, en Estados Unidos el proceso de la esclavitud y para muchas élites latinoamericanas el narcotráfico ha sido una forma de construcción de capital.
Estrada agrega que, las investigaciones que ha realizado sobre los últimos 50 años en el país, hacen concluir que en Honduras quién controla el territorio es quién controla la alianza con el narcotráfico. Ya sean estos: militares, policías, alcaldes, presidentes e incluso en algunos momentos la misma CIA.
El narcotraficante invierte cantidades millonarias de dinero para comprar la droga y él necesita garantizar que el paso de ese cargamento por el país va a ser exitoso. Para eso necesita controlar el territorio entonces, quién controla el territorio es la llave del narcotráfico.
Por eso, es importante discutir quiénes han controlado el territorio, qué grupos económicos han controlado el territorio y nos daremos cuenta con quiénes han tenido alianza los narcotraficantes en el país.
Porque recordemos que el narcotraficante no aterriza una avioneta si no tiene autorización de los dueños de ese territorio. Quiénes son los dueños de esas grandes extensiones de palma africana, por ejemplo, opina Estrada.