Redacción AP

Personas de diferentes religiones de Estados Unidos han firmado una carta abierta al régimen de Ortega-Murillo en donde afirman que en este tiempo de cuaresma, Semana Santa, Pascua y el Ramadán, se sienten llamados a alzar conjuntamente su voz, en contra del sufrimiento de decenas de miles de nicaragüenses.

En la carta firmada por más de 400 personas,   manifiestan que “es la responsabilidad de todo gobierno el defender y proteger la vida de todas las personas del país, incluyendo a quienes disienten. Y es nuestra responsabilidad, como personas de fe, levantar la voz”.

En el texto expresan su solidaridad con las víctimas recordando “a todos los nicaragüenses que perdieron la vida en las protestas que iniciaron en abril de 2018, tanto a quienes decidieron protestar como a los policías. Recordamos a todas las personas heridas en la confrontación que hoy siguen sufriendo las secuelas. Recordamos a las más de 150 mil personas que han huido de la violencia buscando paz, tranquilidad y una vida digna porque en su propio país se sienten amenazadas”.

“Recordamos a las personas que siguen encarceladas, y que han sido juzgadas y condenadas sin el debido proceso legal por disentir y por haber levantado su voz a favor de los derechos humanos y la justicia. Todas estas personas son nicaragüenses, a pesar de lo que opinen del gobierno. Todas son ciudadanas de la Nicaragua bendita” afirman en relación a las personas presas políticas.

Quienes firman le preguntan al Gobierno, “¿Cómo hablar de paz y reconciliación con tantas familias sufriendo los efectos devastadores del encarcelamiento, el destierro y el duelo? ¿Cómo puede una nación prosperar bajo el peso de tanto sufrimiento?”, a la vez instan “al gobierno de Nicaragua a que escuche el clamor de su pueblo y libere a las más de 180 personas encarceladas por disentir del rumbo del gobierno. Esto sería un paso importante para lograr tranquilidad dentro de la gran familia nicaragüense.”

Entre las personas firmantes se encuentra la Hermana Helen Prejean, una monja católica cuyo trabajo en favor de los presos se hizo famoso en la película ganadora de tres Premios Óscar “Dead Man Walking”, y Robert Ellsberg, editor en jefe de Orbis Books, editora que publica obras sobre la teología de la liberación.

Otro firmante de la carta es el Reverendo Paul Shoaf Kozak, pastor episcopal en la Catedral de St. Paul en Boston, quien vivió en América Central y ahora trabaja con poblaciones sin techo y migrantes nicaragüenses.