Nicaragua, junto a Cuba y Venezuela, encabeza la lista de países latinoamericanos con mayor número de periodistas forzados al exilio. Así lo revela el informe “Voces Desplazadas: Radiografía del Exilio Periodístico Latinoamericano”, elaborado por el Programa de Libertad de Expresión y Derecho a la Información (PROLEDI) de la Universidad de Costa Rica.

Entre 2018 y 2024, al menos 913 periodistas abandonaron sus países de origen debido a la persecución política, amenazas, acoso policial y judicial, así como el cierre de espacios informativos, según el estudio.

Además de los tres países con mayores cifras, el informe señala que Guatemala, Ecuador, Haití, México, Colombia y El Salvador también registran un número considerable de periodistas que han debido huir, al considerar que el ejercicio del periodismo ha sido criminalizado.

Exilio forzado y zonas de silencio

De los casos documentados, tres países concentran el 92.31% del total:

  • Venezuela: 477 casos
  • Nicaragua: 268 casos
  • Cuba: 98 casos

La investigación alerta sobre una tendencia grave: “La mayoría de los periodistas en el exilio abandona el ejercicio profesional. Las dificultades para fundar o mantener un medio, la dependencia del financiamiento externo, la persecución transnacional y la necesidad de subsistir llevan a muchos a renunciar a la profesión, generando zonas de silencio y desiertos informativos en la región».

Nicaragua: persecución sistemática contra la prensa

La situación en Nicaragua es especialmente crítica. Desde el estallido social de 2018, más de 250 periodistas han salido del país, de acuerdo a información de diversas organizaciones. Durante el mismo período que cubre el estudio de PROLEDI, el Colectivo Nicaragua Nunca Más reportó al menos 276 comunicadores exiliados, obligados por el contexto represivo del régimen Ortega-Murillo.

El cierre masivo de medios independientes, la aplicación de leyes como la Ley de Ciberdelitos, y el asedio constante contra comunicadores y comunicadoras, no solo ha afectado a quienes ejercen el periodismo, sino que ha privado a la ciudadanía de su derecho a recibir información veraz y diversa.

Según la Fundación para la Libertad de Expresión y Democracia (FLED), al cierre de 2024, 283 periodistas nicaragüenses habían sido forzados al exilio, buscando proteger sus vidas y las de sus familias. En su informe de 2025 titulado “Prensa independiente en Nicaragua: 2024, resiliencia y valentía ante la represión estatal”, la organización documenta nuevos casos, incluyendo:

  • Fabiola Tercero, desaparecida desde julio de 2024.
  • Henry Briceño, desterrado a Costa Rica.
  • Elsbeth D’Anda y Leo Catalino Cárcamo Herrera, ambas personas encarceladas.

La libertad de prensa en Nicaragua atraviesa su periodo más oscuro en décadas, marcada por el exilio, la censura y el miedo.