Por María Gómez
Durante la investidura de Donald Trump, el multimillonario y ahora encargado del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) en Estados Unidos, Elon Musk se mostró eufórico y casuó polémica por hacer un gesto comparable con la salutación nazi, mientras le hablaba a más de 20 mil presentes.
“Las elecciones van y vienen, pero estas han sido realmente importantes. Y quiero dar las gracias por haberlo hecho posible… Gracias a todos, el futuro de la civilización está asegurado”, ha afirmado el dueño de Tesla y X antes de golpearse el pecho con el brazo derecho y lanzarlo hacia arriba dos veces seguidas.
Por su parte, algunos activistas y políticos con ideología de izquierda han decidido dejar la plataforma X de la que es propietario el magnate, porque consideran que se están alentando a la violación de derechos humanos, a la violencia digital y a la censura, entre otras cosas.
Políticos abandonan la red
En España, el partido político de izquierda Sumar anunció que dejaba la plataforma y alertaba que la vuelta de Trump abre un “tiempo peligroso”. La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, confirmó que ella y los ministros de su partido respaldan la decisión de abandonar la red social.
Mientras que el gobierno de turno el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), por medio de la ministra de Educación y portavoz oficial, Pilar Alegría, destacó que el saludo del multimillonario tiene “un parecido bastante inquietante”, pero que este detalló que “no era su intención”.
También el partido de izquierdas Podemos cuestionó las acciones de Musk en el evento, pero no abandonaran la red social.
Para Alegría esto es una decisión personal que cada ministro debe de tomar, de abandonar o no la red.
Musk se defiende
Musk dijo desde su red social que sus críticos “necesitan mejores trucos sucios”. “El ataque de que todo el mundo es Hitler está agotado”.
De igual manera, han reaccionado los seguidores de Trump burlándose de los comentarios contra Musk.
El magnate tecnológico ha sido fuertemente criticado por su apoyo a la extrema derecha europea, usando las mismas estrategias algorítmicas que llevaron a Trump al poder. Lo que hace que aumente el alcance de los mensajes de los ultraderechistas y se lleve una sola visión de lo que es el mundo actualmente.