El dirigente estudiantil Jasson Noel Salazar Rugama, quien se encuentra preso e incomunicado desde el pasado 4 de abril que lo secuestró la policía orteguista, fue trasladado en secreto el pasado viernes 9 de junio al Sistema Penitenciario de Tipitapa Jorge Navarro, conocido como La Modelo, informó el Movimiento Universitario 19 de Abril.

La organización estudiantil denunció en comunicado, que el 8 de junio le realizaron una audiencia inicial sin contar con una persona defensora, práctica constante de secretismo en los procesos judiciales a personas opositoras, una forma con el que los jueces y las juezas orteguistas manejan las denuncias que fabrican contra disidentes a través de la policía y la fiscalía.

Tanto familiares del dirigente estudiantil como defensores de derechos humanos desconocen si Salazar se encontraba preso en las celdas del Distrito III de Managua o en las del Nuevo Chipote, al momento de ser trasladado a La Modelo.

Tampoco conocen los cargos que le imputó la Fiscalía, ni el juzgado en el que ilegalmente se desarrolla en secreto el proceso, ya que el sistema judicial electrónico controlado por la dictadura no proporciona ninguna información al respecto.

La captura del vicepresidente del MU19A se registró en su casa de habitación, ubicada en Managua, previo al contexto del quinto aniversario de las protestas cívicas que estallaron en abril del 2018 contra el régimen Ortega-Murillo.

Desde que lo llegaron a detener ilegalmente, sus familiares no lo han podido ver ya que el régimen ha recurrido últimamente a la desaparición forzada.

“Jasson Salazar es un joven inocente que ama profundamente a su patria. Conocemos su espíritu valiente y su dedicación a la justicia y la libertad. Por ello, exigimos que se brinde información concreta sobre su paradero y que se garantice su integridad física y emocional”, señala el comunicado.

A la vez, advierten que la desaparición forzada de Salazar no es un caso aislado, por lo que hacen un llamado a familiares de presos políticos que les busquen en los centros penitenciarios La Modelo y La Esperanza, ya que no descartan que les hayan trasladado a esas instalaciones.

“Nos dirigimos a la comunidad nacional e internacional para que se unan a nuestra causa, denuncien esta flagrante violación de los derechos humanos y brinden protección a Jasson Salazar y todos los presos políticos de Nicaragua”, agregan.

Otros activistas condenados sin precisar delitos

El régimen no cesa en la criminalización a la disidencia, seis activistas opositores condenados por delitos en los que el Estado y la sociedad nicaragüense son la “víctimas”, divulgó el pasado domingo el sistema digital Nicarao del Poder Judicial.

Los seis ciudadanos nicaragüenses fueron detenidos ilegalmente en el mes de abril en medio de una ola de arrestos, en su mayoría personas opositoras y feligresía católica, así como un periodista, en el marco del quinto aniversario de las manifestaciones populares que estallaron en 2018 contra la dictadura de Ortega-Murillo.

Las personas condenadas son Brenda Lee Baldelomar Alemán, Martha Lorena Centeno Marín, Ivonne Patricia Espinoza Hurtado, Hazel del Socorro Martínez Ulloa, Luis Enrique Obando Palma y Anner Herrera.

La acusación contra las y los seis activistas fue presentada por la fiscal especial Heydi Estela Ramírez Olivas, y la causa fue radicada en el Juzgado Cuarto Local Penal de Managua, presidido por la jueza Ana María Vado Miranda.

Posteriormente fue remitido al Juzgado Segundo Distrito Penal de Ejecución de Sentencia y Vigilancia Penitenciaria, circunscripción Managua, a cargo de la jueza Carmen María Velásquez Lazo, quien les declaró culpables.

Con esas seis personas condenadas, suman siete las declaradas culpables en los últimos días. El primero fue periodista el nicaragüense Víctor Ticay, colaborador del Canal 10 de la televisión local y detenido después de cubrir una procesión religiosa, y declarado “culpable” de falsos delitos como la “propagación de noticias falsas” y menoscabo a la integridad nacional, considerado “traición a la patria”.