Las organizadoras del 15 Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe (EFLAC) publicaron el 25 de noviembre pasado la Declaratoria Final del mismo en la ciudad centroamericana de El Salvador, en la que sintetizan los debates y los acuerdos de las mil 600 participantes del evento. “Las feministas de América Latina y el Caribe, reunidas y reunides en el 15 EFLAC, en El Salvador, nos hermanamos frente a la tiranía y los retrocesos democráticos.

Los dos días del encuentro sirvieron para ser un espacio de redes y articulación regional interseccional, intergeneracional e intercultural. «Con el legado de las ancestras pusimos en palabras las tensiones que nos habitan y acordamos acciones para la soberanía sobre nuestros cuerpos y territorios mientras resistimos y proyectamos un mundo transfeminista”, señalan en la declaratoria.

En la actividad se reafirmó el derecho al aborto libre, legal, seguro y gratuito como
derecho fundamental y lucha emancipadora. Se reconoció la necesidad de avanzar en una estrategia de despenalización, que a la par de la movilización logre generar una fuerza común de solidaridad feminista.

Las participantes plantearon la lucha por transformar los modelos político- económicos y la hegemonía capitalista y extractivista que «sobre explota la naturaleza, genera consumos desmedidos y produce la destrucción de la naturaleza, los territorios y los modos de vida, así como la persecución y expulsión de quienes resisten a los saqueos”. Señalaron que el modelo económico debe poner el centro en la vida y no en el dinero.

Las mil 600 participantes, ponen énfasis en activar la protección integral feminista que en tiempos de crisis y procesos de restitución autoritaria las redes salvan vidas. “Activamos la protección integral feminista: para cuidar nuestros movimientos y honrar a personas y comunidades que nos protegen. «Reconocer las violencias y las políticas represivas nos duele y desgasta, y pone en riesgo nuestras luchas”.

Las feministas reconocieron que tienen “un saber histórico: redes comunitarias de protección; procesos de sanación ancestral; espacios de refugio y un largo etcétera”. Por eso se propone que el EFLAC siga siendo espacio para honrar la memoria de quienes les fueron arrebatadas y convocan a que cada 29 de noviembre, Día Internacional de las Defensoras, se alce la voz para denunciar las violencias.

El EFLAC se plantea como pacto transfeminista

Quienes participaron en el evento, acordaron que el próximo 25 de noviembre de 2024, signifique el lanzamiento de una red que sirva para exigir a los Estados la prevención, sanción y erradicación de la violencia contra las mujeres y disidencias”, añade la Declaratoria.

Agregaron que las mujeres sobreviven a las violencias estructurales, que lo que busca es «invisibilizarlas, censurarlas, patologizarlas y hasta esterilizarlas»; a su vez reconocieron que son personas «trans, no binaries, género fluidas, intersex, queer, lesbianas, bisexuales, pansexuales y agénero, mujeres discas, indígenas, negras, mujeres viviendo con VIH, gordas, brujas y locas».

El movimiento feminista reconocieron, pasa por debates, tensiones y fracturas. Por ello, hacen un llaman a todos los territorios y convocan al diálogo interno para la articulación, para fortalecer el horizonte feminista. Consideran que se debe centrar la discusión sobre objetivos, de un «para qué», por encima del «feminismo para quién o quiénes». Por eso se proponen realizar encuentros o asambleas locales camino al próximo EFLAC, “recuperar la memoria para contextualizar conflictos y convocar y participar de los próximos 8M como huelgas feministas”.

Un debate sostenido a lo largo del Encuentro, fue la interseccionalidad y la lucha antirracista una práctica feminista. “La estructura racista, patriarcal, clasista, capacitista, capitalista y hetero-cisnormativa afecta nuestros cuerpos. Hay que entender estas opresiones y resistencias como transversales en nuestros espacios y movimientos”.

Las feministas declararon que seguirán denunciando el poder que las oprime y potenciarán el poder transformador que contagia empatía, amor entre mujeres y esperanza a todos los pueblos de la región. En la declaratoria, se reconocen en la diversidad de lenguajes y expresiones como artistas, comunicadoras y periodistas, en el afán de posicionar el arte, la cultura y la comunicación feministas como ejes transformadores que inciden y son parte de las luchas por incomodar al sistema.

Parte de los mensajes que se citan en la Declaratoria del 15 Encuentro Feminista y del Caribe son ¡Justicia para Beatriz!. Respeto al voto popular en Guatemala. Exigimos la no intervención y militarización en Haití. Libertad para las presas políticas en Nicaragua. Nos solidarizamos con las feministas en Argentina. ¡Queremos una Palestina libre!

Al finalizar precisaron que la potencia feminista es transformadora, pese a las restricciones a los derechos humanos de las mujeres, amenazas, persecuciones, desinformación y odio hacia sus identidades, y los feminismos se continúan organizando.